King James Bible Adam Clarke Bible Commentary Martin Luther's Writings Wesley's Sermons and Commentary Neurosemantics Audio / Video Bible Evolution Cruncher Creation Science Vincent New Testament Word Studies KJV Audio Bible Family videogames Christian author Godrules.NET Main Page Add to Favorites Godrules.NET Main Page




Bad Advertisement?

Are you a Christian?

Online Store:
  • Visit Our Store

  • SAGRADAS ESCRITURAS (SEV)
    Online Spanish Bible - JOHN 4

    ANTERIOR CAPÍTULO - SIGUIENTE CAPÍTULO - AYUDA     

    4:1 ¶ De manera que cuando el Señor supo como los fariseos habían oído que Jesús hacía discípulos y bautizaba más que Juan,

    4:2 (aunque Jesús no bautizaba, sino sus discípulos),

    4:3 dejó a Judea, y se fue otra vez a Galilea.

    4:4 ¶ Y era necesario que pasase por Samaria.

    4:5 Vino, pues, a una ciudad de Samaria que se llamaba Sicar, junto a la heredad que Jacob dio a José su hijo.

    4:6 Y estaba allí la fuente de Jacob. Pues Jesús, cansado del camino, así se sentó a la fuente. Era como la hora sexta.

    4:7 Vino una mujer de Samaria a sacar agua; y Jesús le dice: Dame de beber.

    4:8 (Porque sus discípulos habían ido a la ciudad a comprar de comer.)

    4:9 Y la mujer samaritana le dice: ¿Cómo tú, siendo judío, me pides a mí de beber, que soy mujer samaritana? Porque los judíos no se tratan con los samaritanos.

    4:10 Respondió Jesús y le dijo: Si conocieses el don de Dios, y quién es el que te dice: Dame de beber; tú pedirías de él, y él te daría agua viva.

    4:11 La mujer le dice: Señor, no tienes con qué sacarla, y el pozo es hondo; ¿de dónde, pues, tienes el agua viva?

    4:12 ¿Eres tú mayor que nuestro padre Jacob, que nos dio este pozo, del cual él bebió, y sus hijos, y sus ganados?

    4:13 Respondió Jesús y le dijo: Cualquiera que bebiere de esta agua, volverá a tener sed;

    4:14 mas el que bebiere del agua que yo le daré, para siempre no tendrá sed; sino que el agua que yo le daré, será en él una fuente de agua que salte para vida eterna.

    4:15 La mujer le dice: Señor, dame esta agua, para que no tenga sed, ni venga acá a sacarla.

    4:16 Jesús le dice: Ve, llama a tu marido, y ven acá.

    4:17 Respondió la mujer, y le dijo: No tengo marido. Le dice Jesús: Bien has dicho: No tengo marido;

    4:18 porque cinco maridos has tenido; y el que ahora tienes no es tu marido; esto has dicho con verdad.

    4:19 Le dice la mujer: Señor, me parece que tú eres profeta.

    4:20 Nuestros padres adoraron en este monte, y vosotros decís que en Jerusalén es el lugar donde es necesario adorar.

    4:21 Le dice Jesús: Mujer, créeme, que la hora viene, cuando ni en este monte, ni en Jerusalén adoraréis al Padre.

    4:22 Vosotros adoráis lo que no sabéis; nosotros adoramos lo que sabemos; porque la salud viene de los Judíos.

    4:23 Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en Espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren.

    4:24 Dios es Espíritu; y los que le adoran, en Espíritu y en verdad es necesario que adoren.

    4:25 Le dice la mujer: Sé que el Mesías ha de venir, el cual se dice el Cristo; cuando él viniere nos declarará todas las cosas.

    4:26 Le dice Jesús: Yo Soy, que hablo contigo.

    4:27 ¶ Y en esto vinieron sus discípulos, y se maravillaron de que hablaba con aquella mujer; mas ninguno dijo: ¿Qué preguntas? O, ¿Qué hablas con ella?

    4:28 Entonces la mujer dejó su cántaro, y fue a la ciudad, y dijo a aquellos hombres:

    4:29 Venid, ved un hombre que me ha dicho todo lo que he hecho; ¿si quizás es éste el Cristo?

    4:30 Entonces salieron de la ciudad, y vinieron a él.

    4:31 Entre tanto los discípulos le rogaban, diciendo: Rabí, come.

    4:32 Y él les dijo: Yo tengo una comida que comer, que vosotros no sabéis.

    4:33 Entonces los discípulos decían el uno al otro: ¿Si le habrá traído alguien de comer?

    4:34 Les dice Jesús: Mi comida es que haga la voluntad del que me envió, y que acabe su obra.

    4:35 ¿No decís vosotros que aún hay cuatro meses y la siega viene? He aquí os digo: Alzad vuestros ojos, y mirad el campo, porque ya están blancas para la siega.

    4:36 Y el que siega, recibe salario, y allega fruto para vida eterna; para que el que siembra también goce, y el que siega.

    4:37 Porque en esto es el dicho verdadero: Que uno es el que siembra, y otro es el que siega.

    4:38 Yo os he enviado a segar lo que vosotros no labrasteis; otros labraron, y vosotros habéis entrado en sus labores.

    4:39 Y muchos de los samaritanos de aquella ciudad creyeron en él por la palabra de la mujer, que daba testimonio, diciendo : Que me dijo todo lo que he hecho.

    4:40 Viniendo pues los samaritanos a él, le rogaron que se quedase allí; y permaneció allí dos días.

    4:41 Y creyeron muchos más por la palabra de él.

    4:42 Y decían a la mujer: Ya no creemos por tu dicho; porque nosotros mismos hemos oído, y sabemos que verdaderamente éste es el Salvador del mundo, el Cristo.

    4:43 ¶ Y dos días después, salió de allí, y se fue a Galilea.

    4:44 Porque el mismo Jesús dio testimonio de que un profeta en su tierra no tiene honra.

    4:45 Y cuando vino a Galilea, los galileos le recibieron, vistas todas las cosas que había hecho en Jerusalén en la Fiesta; porque también ellos habían ido a la Fiesta.

    4:46 Vino pues Jesús otra vez a Caná de Galilea, donde había hecho el vino del agua. Y había en Capernaum uno del rey, cuyo hijo estaba enfermo.

    4:47 Este, cuando oyó que Jesús venía de Judea a Galilea, fue a él, y le rogaba que descendiese, y sanase a su hijo, porque se comenzaba a morir.

    4:48 Entonces Jesús le dijo: Si no viereis señales y milagros no creeréis.

    4:49 El del rey le dijo: Señor, desciende antes que mi niño muera.

    4:50 Le dice Jesús: Ve, tu hijo vive. Y el hombre creyó a la palabra que Jesús le dijo, y se fue.

    4:51 Y cuando ya él descendía, los siervos le salieron a recibir, y le dieron nuevas, diciendo: Tu hijo vive.

    4:52 Entonces él les preguntó a qué hora comenzó a estar mejor. Y le dijeron: Ayer a la séptima le dejó la fiebre.

    4:53 El padre entonces entendió, que aquella hora era cuando Jesús le dijo: Tu hijo vive; y creyó él y toda su casa.

    4:54 Esta también el la segunda señal que Jesús hizo, cuando vino de Judea a Galilea.

    SIGUIENTE CAPÍTULO - ÍNDICE Y BÚSQUEDA DE BIBLIA

    God Rules.NET
    Search 100+ volumes of books at one time. SEV Biblia Buscar Reina Valera Buscar Portugués Biblia Buscar